Nuestros abuelos comenzaron el día poniendo rumbo a la localidad fronteriza de Ayamonte.
Una vez allí, pudieron pasear por el muelle de la localidad recién reformado, donde disfrutaron de las maravillosas vistas del Puente Internacional, del río Guadiana y de Portugal.
Continuamos la experiencia, embarcándonos en ferry y cruzamos el río Guadiana hasta llegar a Villa Real de Santo Antonio. Una vez allí, pasearon por sus calles, conocieron la Plaza del Marqués de Pombal y disfrutaron de sus tiendas y la artesanía lusa.